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El senador Carlos Montes votó en contra del control preventivo de identidad, contenido en la agenda corta antidelincuencia que se tramita en el Senado. El legislador argumentó que la medida resulta muy parcial e inadecuada, particularmente respecto de los jóvenes para quienes – sostuvo – no existen políticas públicas integrales.

«No asumimos el deterioro valórico, la desocialización  la desarticulación que existe en la base de la sociedad» -dijo- criticando los fundamentos de la propuesta. «Aquí no se ve un análisis serio y fundado. No hay fundamentos suficientemente rigurosos, se dicen cosas tremendamente discutibles» – recalcó.

El legislador explicó su rechazo -y el de toda la Bancada PS- a entregar esta facultad a las policías señalando, en primer término, que se trata de una restricción a la libertad individual que no tiene fundamento en una decisión judicial, solamente en el arbitrio administrativo.

Seguidamente sostuvo que «se abre una amplia posibilidad a las discriminaciones». Con datos de la Defensoría Penal Pública explicó que en el año 2012, de las detenciones declaradas ilegales por la justicia, un 23,7% afectó a etnias originarias, 17,1% a jóvenes y un 13,5% a extranjeros. Expresó que, en este sentido, UNICEF ha advertido sobre la existencia en la normativa en estudio de muchos vacíos e imprecisiones, que pueden prestarse para grandes abusos.

El parlamentario cuestionó, además, la efectividad de esta medida. «Se amplia una atribución cuya eficacia es muy incierta y con evaluación inexistente o al menos desconocida.»

Por último, Montes criticó la inexistencia de canales apropiados para investigar y sancionar los abusos. «La Justicia Militar en general no funciona» – fustigó.

Resumió, manifestando que «se aprecian numerosos riesgos de excesos y discriminación; escasos beneficios concretos, en términos de eficiencia policial e insuficientes medidas de control y resguardo» y remarcando la necesidad de soluciones más integrales y preventivas. «Necesitamos una política pública seria para los niños, los adolescentes y jóvenes, esto no va a ayudar para eso. Seamos responsables y no caigamos en una discusión como si esto fuera a resolver grandes cosas. Tenemos que asumir lo que está ocurriendo en la sociedad» – concluyó.


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